Estaba Valencia gobernada por Agrescio, cuando es sitiada por las tropas de Tariq ibn Ziyad. Aquello sería apenas dos o tres años después del comienzo de la llegada de nuestras tropas a al-Andalus. El monarca visigodo Rodrigo había sido derrotado y casi toda la península estaba ya en poder del islam.
Sí, así fue. Los omeyas, en su plan de ampliar su califato por los territorios del extinto Imperio Romano, y tras ocupar Ifriqiya y el Magreb, habían planeado ya desde hacía algún tiempo la conquista de la península Ibérica. Dando cumplimiento a ese plan, comienzaron a enviar tropas a al-Andalus a través del mar, el mes de Ramadán del año 92 de la Hégira, aprovechando el momento vulnerable que vivía el reino visigodo, debilitado por las intrigas y luchas intestinas por el poder. Al mando del gran general bereber Tariq, muchos barcos llegaron a Algeciras con un gran número de soldados árabes y bereberes a bordo. El rey Rodrigo, alarmado por las noticias que le llegaban, se desplazó en persona a detener aquella invasión pero, cuando llegó frente al campamento de Tariq, éste ya contaba con más de 12.000 hombres. Con ellos, estaba Julián, conde visigodo de Ceuta, y sus tropas. Su interés en deponer a Rodrigo le llevó a aliarse con los nuestros, a pesar profesar el cristianismo.
Estrecho de Gibraltar (foto por wikipedia) |
Así pues, tras darse una vuelta por las tierras de Pamplona, Zaragoza y Tarragona, en el año 95 de la Hégira, las tropas de Tariq llegan ante las murallas de Valencia y ponen sitio a esta ciudad. En uno de los asaltos, se incencia el almacén de grano, poco protegido, situado equivocadamente muy cerca de la muralla norte. Sin acceso al alimento y tampoco al agua del río, el pueblo padece necesidad y Agrescio capitula.
Valentia visigoda, conquistada por Tariq (según Albert Vicent Ribera Lacomba) |
¿Qué pasa durante esos casi 400 años? No es sencillo de contar. Se trata de una época turbulenta y maravillosa a la vez. Grandes líderes nos defenderán y mezquinos cobardes nos traicionarán. Pero, por hoy, mi amado Ahmad, ya es suficiente: estoy muy cansado. Sé paciente. Pronto te contaré el resto de la historia.
Excelente idea la de este blog, que nos entretiene y nos da a conocer capítulos de nuestro pasado
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